Otro destino que todos esperábamos: ¡poder viajar a la ciudad de los canales! Llegamos en un barco reservado solo para nosotros, desembarcando en el famoso Puente de Rialto. Desde allí, caminamos hasta nuestros apartamentos, ansiosos por sumergirnos en la magia veneciana.
Nuestro primer contacto con la gastronomía local fue una delicia. Comenzamos con pizzas y pastas que superaron todas nuestras expectativas, seguidas de gelato y una variedad de ricos dulces tradicionales. Cada bocado nos recordó por qué Italia es famosa por su comida.
A pesar de algunos choques culturales, los hemos manejado con entusiasmo y curiosidad, viendo cada experiencia como una oportunidad para aprender y crecer. Venecia, con su mezcla única de historia, arte y cultura, nos ha dejado maravillados.
Mañana, continuaremos con nuestro recorrido cultural, explorando más de lo que esta increíble ciudad tiene para ofrecer. ¡La aventura continúa!
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